Ponerle al polvo buena cara
- 17 mayo 2013
Hasta la llegada de los cascos integrales, los pilotos tenían que ponerle cara al polvo y a la suciedad que desprendían el resto de los coches a lo largo de la carrera, quedando marcado en su rostro no solo la dureza de la prueba, sino también las marcas de la batalla. Aquí podemos ver a Stirling Moss y a Juan Manuel Fangio celebrando su éxito, tras copar las dos primeras posiciones con sus Mercedes W196 en el GP de Gran Bretaña de 1955, disputado en el circuito de Aintree.