Cajas de cambio con siete marchas
Porsche estrena, por primera vez en el mundo, un cambio manual de siete velocidades en sus 911 Carrera y Carrera S. La selección de las marchas es similar a la de cualquier otro modelo convencional, con la primera a la izquierda y hacia delante, mientras que la séptima se engrana también hacia delante pero en el extremo derecho.
También pueden llevar, en opción, la caja PDK con doble embrague pilotado (que ya incluía siete velocidades en el anterior modelo), aunque su puesta a punto ha sido revisada en el nuevo 911 para obtener un funcionamiento aún más eficaz. El cambio de marchas se puede realizar de forma completamente automatizada o bien de manera manual secuencial, mediante la palanca de cambios o a través de los mandos situados en el volante. Dependiendo del programa de cambio seleccionado (activando la tecla “Sport” situada en la consola central”), el cambio de marchas puede ser especialmente confortable o extraordinariamente deportivo, realizando la selección en escasos milisegundos.
Las versiones con cambio PDK que lleven el paquete opcional “Sport Chrono” disfrutan de dos funciones adicionales: el control de arrancada desde parado (“Launch Control”) y el programa de “Estrategia de cambio de competición”.
Lo que no han cambiado en Porsche son los mandos de selección manual de marchas situados en la parte frontal del volante (a las 9:15) y que tantas críticas han recibido por su inadecuada comodidad de manejo. A cambio, se ofrece en opción el volante “SportDesingn”, con levas situadas detrás del volante, que aporta un accionamiento mucho más agradable.
Tanto en la caja manual como en la PDK, las marchas entre la 1ª y la 6ª cuentan con un escalonamiento deportivo, que favorece las prestaciones, mientras que la 7ª es una marcha de desahogo, con un desarrollo muy largo para favorecer el consumo (51 km/h cada 1.000 rpm con cambio manual y 58 km/h cada 1.000 rpm con cambio PDK). En cualquier caso, la velocidad máxima se obtiene en la sexta marcha.