El desarrollo del Toleman-Hart TG184 de Ayrton Senna
El Toleman-Hart TG184 que llevó hasta el podio Ayton Senna en la temporada 1984 fue diseñado por Rory Byrne (Ingeniero Jefe), con la colaboración directa de Pat Symonds (Ingeniero de Investigación y Desarrollo) y Adrian O’Beirne (Investigación y Desarrollo Aerodinámico).
Una de sus peculiaridades aerodinámicas más destacadas era el enorme alerón doble que presidía la parte trasera, contando ya con un chasis monocasco fabricado en fibra de carbono (solución empleada por primera vez en el McLaren MP4/1 de 1981).
El chasis desarrollado por Byrne parecía funcionar bien en todo tipo de trazados y el monoplaza tenía un ajustado peso de 540 kilogramos, pero el motor Hart 415T no alcanzaba el nivel de potencia suficiente para luchar más allá de mitad de parrilla en condiciones de seco.
El propulsor 1.5 Turbo elaborado por Brian Hart rondaba los 660 CV a 10.500 rpm, mientras que el resto de motores turboalimentados de los equipos punteros ya superaban holgadamente los 800 CV de potencia (TAG-Porsche, Honda, Renault y Ferrari).
El equipo Toleman acudió a las cuatro primeras pruebas de la temporada 1984 con el Toleman-Hart TG183B empleado el año anterior. No obstante, el debutante Senna fue capaz de sumar ya sus primeros puntos (sexta posición) en la segunda carrera (GP de Sudáfrica – Kyalami).
El estreno del nuevo monoplaza llegaría en el GP de Francia (Dijon-Prenois), donde Ayrton Senna se subía a los mandos del Toleman TG184-02 (chasis 2) que lucía el número 19. El brasileño se clasificaba decimotercero en parrilla, a 3,5 segundos de la “pole” de Patrick Tambay (Renault) y claramente por delante de su compañero de equipo, Johnny Cecotto (18º a 5,9 segundos), pero ambos debían retirarse en carrera al romperse el turbocompresor de sus motores Hart.
Aunque Senna tenía que recurrir al chasis TG184-01 de reserva en alguna circunstancia, el Toleman-Hart TG184-02 sería ya el compañero de fatigas del piloto brasileño a lo largo del año, obteniendo en su segunda carrera con el monoplaza (GP de Mónaco) esa segunda posición que supo casi a victoria sobre el trazado encharcado de Montecarlo.
Cada vez más consistente en la competición, Senna era capaz de suplir con su “magia” al volante la potencia que le faltaba al coche, aunque su desbordada ambición le llevaba a algún que otro accidente (GP de Detroit, Alemania y Europa) y la mecánica le dejaba fuera de carrera en varias ocasiones (GP de Dallas, Austria y Holanda).
No obstante, Ayrton Senna y el Toleman-Hart TG184-02 volverían a subirse al tercer escalón del podio en los Grandes Premios de Gran Bretaña y Portugal, conquistando así la séptima posición final en el Campeonato de Constructores para Toleman (la mejor en la historia del equipo británico).
Semejante éxito del piloto brasileño despertó rápidamente la atención del resto de los equipos punteros (McLaren y Brabham ya le habían ofrecido un puesto de piloto de pruebas para 1984) y Lotus formalizó su fichaje para la temporada 1985 ya durante el GP de Holanda.
El enfado del equipo Toleman ante tal circunstancia fue tan manifiesto que dejaron a Senna sin correr en el siguiente GP de Italia, ocupando el “cockpit” del Toleman-Hart TG184-02 número 19 el piloto sueco, Stefan Johansson, que cruzó la línea de meta de Monza en la cuarta posición.
Senna volvería de nuevo a los mandos de su monoplaza para disputar los dos últimos Grandes Premios de la temporada 1984 (Europa y Portugal), finalizando el año con un sensacional tercer puesto en el podio del circuito de Estoril. Tras semejante éxito, los mecánicos de Toleman le entregaron un profético cartel de recuerdo que decía: “Toleman nunca será lo mismo sin Senna”.
El Toleman-Hart TG184-02 iba a ser utilizado también por Stefan Johansson para disputar las primeras carreras de la temporada 1985, pero un problema del equipo con el suministro de neumáticos les dejó fuera de competición y el piloto escandinavo abandonaba Toleman, quedándose con la propiedad del monoplaza, quizá como parte de pago del algún dinero adeudado con el equipo británico.