Imagen deportiva, carrocería de aluminio y soportes de motor activos
El Mercedes AMG GT / AMG GT S cuenta con una carrocería monocasco “Spaceframe” construida enteramente en aleación ligera. El 90 % de sus componentes están fabricados en aluminio, mientras que el capó es de magnesio y el portón trasero está realizado en acero. De esta manera, se ha conseguido que el peso bruto de la carrocería sea de tan solo 231 kilogramos.
Tiene 4.546 mm de longitud, 1.939 mm de anchura y 1.289 mm de altura, en una configuración estilística inspirada en el antiguo Mercedes 300 SL “Gullwing” (1954) y el moderno Mercedes SLS AMG (2010), que destaca por su alargado capó delantero, las marcadas tomas de refrigeración laterales, el habitáculo biplaza desplazado hacia atrás y una zaga que resalta la generosa anchura del vehículo.
Detalles aerodinámicos como el faldón frontal (perfil “A-Wing”), el difusor trasero o el alerón posterior activo aportan la carga aerodinámica necesaria para incrementar el agarre de sus anchos neumáticos de altas prestaciones, que están montados sobre llantas forjadas de aleación ligera con distintos diseños y medidas.
El Mercedes AMG GT lleva de serie las llantas AMG de 19 pulgadas con diseño de diez radios, calzadas con neumáticos 255/35 R19 delante y 295/35 R19 detrás, mientras que las dimensiones crecen en la versión AMG GT S más potente, con llantas de 19” delante y 20” detrás, que montan neumáticos en medida 265/35 R19 en el eje delantero y 295/30 R20 en el trasero (las mismas dimensiones que en el Mercedes SLS AMG).
Para optimizar el reparto de pesos (47 % en el eje delantero y el 53 % restante en el eje trasero), los ingenieros de Mercedes han colocado el motor en disposición delantera longitudinal (centrado por detrás del eje delantero), mientras que la caja de cambios “AMG SPEEDSHIFT DCT” de 7 marchas está situada por delante del eje trasero (en disposición “transaxle”).
Otro de los elementos reseñables en este nuevo coupé deportivo es el paquete “AMG Dynamic Plus”, que se ofrece en opción exclusivamente en la versión AMG GT S. Dicho paquete comprende apoyos dinámicos para el motor y la caja de cambios, que modifican su rigidez de forma progresiva e instantánea a las condiciones de conducción y el comportamiento de marcha.
Mediante distintos sensores, el programa de conducción seleccionado y el trabajo de su gestión electrónica “ACC” (“AMG Chassis Controler”), los soportes dinámicos del motor (delante) y la caja de cambios (detrás) regulan su dureza de manera individual pero perfectamente coordinada.
Los apoyos blandos favorecen el confort y filtran mejor el ruido y las vibraciones, mientras que la configuración más dura de dichos soportes aporta una mayor rigidez al conjunto del chasis para incrementar la eficacia en conducción exigente y la precisión de reacciones percibida al volante.