Motor V8 3.9 Turbo con 670 CV de potencia
Ferrari ha utilizado para el 488 GTB un nuevo motor de 8 cilindros en V a 90º fabricado enteramente en aluminio, con 3.902 centímetros cúbicos, inyección directa de gasolina, distribución variable y doble turbocompresor “IHI” (uno por bancada de cilindros) de doble entrada (“Twin Scroll”), con el aire de admisión refrigerado por dos “intercooler” (uno para cada turbo). Es una evolución del empleado también en el nuevo Ferrari California T de segunda generación.
Como en el resto de los modelos de Ferrari, dicho propulsor tiene cárter seco e introduce unos nuevos colectores de admisión que optimizan el llenado de los cilindros y unos evolucionados inyectores perforados con láser, que permiten una presión de trabajo de hasta 200 bar.
El sistema de distribución variable trabaja sobre las válvulas de admisión y escape y cuenta con unos empujadores de rodillo que minimizan las pérdidas por fricción.
El resultado son 670 CV de potencia a 8.000 rpm y un par máximo de 760 Nm a 3.000 rpm, con una elevada potencia específica de 171,4 CV/litro y un tiempo de respuesta al acelerador de tan solo 0,8 segundos desde 2.000 rpm. Así pues, se ha reducido al máximo el denominado “turbo lag” y en Ferrari afirman que tiene una respuesta inmediata, similar a la de los motores atmosféricos. Esto se ha conseguido gracias al empleo de unas nuevas turbinas fabricadas en aleación de titanio y aluminio (“TiAl”), cuya ligereza facilita al máximo el giro, reduce su inercia y minimiza el tiempo de respuesta. Los ejes de dichas turbinas van montadas sobre cojinetes de bolas, reduciendo así la fricción.
La cifra de par motor es tan elevada que su entrega máxima se realiza tan solo en séptima marcha (en Ferrari han tenido que limitar el par máximo en las marchas inferiores para evitar un excesivo patinamiento de los neumáticos traseros y hacer así su conducción más asequible). En función de la situación puntual de conducción, el control electrónico de la “Gestión Variable de Par” va aumentando la cantidad de par entregado según se sube de marcha.
Con semejantes cifras y un peso en vacío de 1.475 kilogramos, su relación peso/potencia es de 2,2 kg/CV, que le permiten acelerar de 0 a 100 km/h en 3,0 segundos y de 0 a 200 km/h en 8,3 segundos, superando una velocidad máxima de 335 km/h.
Al incremento de prestaciones se une una nueva reducción de consumo, cuya cifra media homologada es de 11,4 l/100 km en el nuevo Ferrari 488 GTB (11,8 l/100 km en el anterior Ferrari 458 Speciale y 13,3 l/100 km en el Ferrari 458 Italia).
El característico “Manettino” sigue ubicado en el volante y no presenta cambios respecto a la generación anterior. Dicho conmutador permite al conductor seleccionar entre cinco posibles modos de conducción, denominados “Wet” (“Lluvia”), “Sport” (“Deportivo), “Race” (“Carrera”), “CT Off” (“Control de tracción desconectado”) y “ESC Off” (“Control de Estabilidad desconectado).