Nueva suspensión, dirección y frenos
Para poder incrementar la anchura de vías del nuevo Cayman, en Porsche han revisado por completo el diseño de la suspensión delantera de tipo McPherson y en menor medida el McPherson del eje trasero. Ahora lleva delante nuevos brazos más compactos que en el anterior modelo, aspecto que aporta una mayor rigidez y precisión a la hora de mantener la inclinación de las ruedas.
Como en la anterior generación, el Cayman sigue contando en opción con la suspensión activa de dureza variable “PASM” (“Porsche Active Suspension Management”), que regula de forma constante la dureza de los amortiguadores en función de la situación de conducción, además de rebajar la altura 10 mm. Aunque la suspensión “PASM” se regula de forma activa, el conductor puede seleccionar entre dos programas de funcionamiento (“Normal” y “Sport”) mediante un botón situado en la consola central.
La dirección con asistencia electromecánica variable en función de la velocidad es otras de las novedades introducidas en el Porsche Cayman. Con 2,6 vueltas de volante entre topes, el nuevo mecanismo contribuye a reducir las cifras de consumo, además de mostrar un tacto agradable en cualquier circunstancia.
En el apartado de frenos, los nuevos modelos reciben pinzas delanteras de última generación (con pastillas de mayor tamaño), además de un servofreno de desarrollo completamente nuevo. El Cayman lleva discos ventilados y perforados en las cuatro ruedas, de 315 x 28 mm delante (diámetro x espesor) y 299 x 20 mm detrás. El equipo del Cayman S se refuerza con unos discos ventilados y perforados de mayor tamaño en el eje delantero, que tienen una medida de 330 x 28 mm, compartiendo en el eje trasero los mismos discos del Cayman (299 x 20 mm). En ambas versiones, las pinzas de freno son fijas, monobloque de aluminio y tienen cuatro pistones en las cuatro ruedas, aunque están pintadas en color negro en el Cayman y de color rojo en el Cayman S.
Opcionalmente puede llevar también el equipo de frenos “PCCB” (“Porsche Ceramic Composite Brakes”), tan solo recomendable para aquellos que quieran explotar a fondo las cualidades dinámicas de los Porsche Cayman y Cayman S. Tiene cuatro discos flotantes, ventilados y perforados, de 350 mm de diámetro, con la zona de fricción en material carbono cerámico y la campana interior en aluminio. Además, se distinguen por tener las pinzas pintadas en color amarillo, de seis pistones delante y cuatro pistones detrás.
El equipo de frenos “PCCB” no solo ofrece una mayor resistencia al trato duro, sino que también reduce el peso de las masas no suspendidas (los discos cerámicos pesan en torno a un 50% menos que unos de similar tamaño en fundición gris) y permite a la suspensión trabajar con mayor eficacia, especialmente en carreteras con firme irregular.
En los nuevos Porsche Cayman se ha sustituido el freno de mano manual por un freno de estacionamiento eléctrico, que resulta más cómodo en el uso cotidiano pero también imposibilita la realización de ciertas técnicas de conducción avanzada, solo posibles con el freno de mano.