Un nuevo chasis con dos tipos de suspensión trasera
Seat ha adoptado dos configuraciones de suspensión diferentes para las ruedas posteriores del nuevo Seat León III. Bueno, más bien comparte soluciones y elementos mecánicos con el Audi A3 III y el Volkswagen Golf VII, que tienen una configuración similar a la empleada en los León SC en los equipos de suspensión, dirección y frenos.
Si bien en el eje delantero se aplica el mismo esquema independiente McPherson para todas las unidades, en el tren trasero encontramos un eje torsional en las versiones que tienen hasta 150 CV de potencia y una suspensión multibrazo de paralelogramos deformables para las versiones más potentes (1.8 TSI FR y 2.0 TDI FR).
Como es lógico, la eficacia cinemática de dicha suspensión independiente multibrazo resulta superior en cualquier circunstancia (especialmente sobre pisos bacheados), pero también es una solución más pesada y más costosa, repercutiendo en el precio del vehículo. Por eso, en el resto de las versiones se ha recurrido a un eje trasero torsional de brazos tirados, esquema semi-independiente más ligero, sencillo y económico en su fabricación.
La dirección tiene asistencia electromecánica en todas las versiones, una solución que no consume energía mientras el vehículo avanza en línea recta y permite así ajustar las cifras de consumo. Su grado de asistencia varía en función de la velocidad y cuenta con 2,7 vueltas de volante, mientras que el diámetro de giro es de 10,2 metros.
El equipo de frenos se ha confiado en todas las versiones a discos ventilados de 288 x 25 mm (diámetro x grosor) delante y discos macizos de 253 x 10 mm detrás, mientras que las dos versiones más potentes (1.8 TSI 180 CV FR y 2.0 TDI 184 CV FR) llevan un equipo sobredimensionado con discos ventilados delanteros de 312 x 25 mm y discos macizos de 272 x 10 mm en las ruedas posteriores.
Además de elementos como el control de tracción “ASR” (desconectable), el control de estabilidad “ESC” o el sistema de frenado automático en rampa “HHC”, las ayudas electrónicas cuentan también con el dispositivo “XDS”, un frenado electrónico de diferencial que actúa a modo de autoblocante (frenando automáticamente la rueda que patina y pierde motricidad).