Coincidiendo con el Festival de la Velocidad de Goodwood 2013 (Gran Bretaña), Caterham ha presentado su “roadster” más potente y extremo fabricado hasta la fecha. Se trata del Caterham Seven 620R, todo un homenaje a la ligereza, la potencia y las prestaciones, un coche aún más rápido y eficaz que el anterior Seven Superlight R500 (265 CV) al que reemplaza, con especificaciones propias de los coches de competición
Materiales ligeros como la fibra de carbono y el aluminio permiten fijar su peso en 545 kilogramos, mientras que el vano delantero recibe un motor Ford Duratec 2.0 16V que desarrolla 315 CV de potencia a 7.700 rpm y un par máximo de 297 Nm a 7.350 rpm, gracias a la sobrealimentado mediante un compresor volumétrico.
Las especificaciones técnicas de la transmisión también se encuentran al máximo nivel, contando con una caja de cambios manual secuencial de seis velocidades (que permite subir marchas sin levantar el pie del acelerador) y un diferencial autoblocante en el eje trasero.
Con semejantes valores y una relación peso/potencia de 1,73 kg/CV, el Caterham Seven 620R es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 2,8 segundos y alcanzar una velocidad máxima de 250 km/h.
Su chasis tubular está fabricado en una aleación denominada “gunmetal” (muy resistente a la corrosión del agua y la sal) y a nivel mecánico se han realizado mejoras en el sistema de refrigeración (adaptadas a las nuevas exigencias térmicas del motor), además de practicar entradas de aire adicionales en la parte frontal.
La suspensión mantiene el tradicional eje delantero independiente (mediante dobles triángulos superpuestos) y el eje trasero rígido con puente “De Dion” y paralelogramo “De Watt”, aunque se han incorporado amortiguadores Bilstein de reglaje específico con muelles helicoidales regulables en precarga.
El equipo de frenos cuenta delante con discos ventilados y pinzas fijas de cuatro pistones, mientras que los discos macizos traseros tienen pinzas flotantes monopistón. No existen ayudas electrónicas a la conducción (como el ABS) ni tampoco dispositivo de asistencia en su dirección con cremallera y piñón (con tan solo 1,9 vueltas de volante entre topes).
Dada su orientación para rodar principalmente en circuito, el Caterham Seven 620R lleva de serie unos neumáticos Avon ZZ-R semi “slick” (sin dibujo tallados) en medida 185/55 R13 delante y 215/55 R13 detrás, montados sobre llantas de aleación ligera desmontables (de dos piezas).
El habitáculo carece de todo elemento de confort y no lleva ni siquiera un equipo de audio. El salpicadero está acabado en fibra de carbono y presenta una disposición específica de todos los conectores (con mandos inspirados en los coches de carreras), mientras que el volante “Momo” de tres radios tiene un mecanismo que permite su fácil extracción (para facilitar al conductor el acceso y la salida del “cockpit”). La estructura de sus asientos bacquet también está realizada en fibra de carbono (con tapicería mixta en cuero y Alcantara) y los cinturones de tipo arnés tienen cuatro puntos de anclaje.
Las primeras unidades del Caterham Seven 620R se entregarán a finales de 2013 y sus clientes podrán configurar el exterior con un parabrisas desmontable o con un simple derivabrisas realizado en fibra de carbono.
Su precio en Gran Bretaña es, al cambio, de 57.663 euros con impuestos incluidos, aunque de momento no hay precio declarado para el mercado español.