El nuevo Porsche 911 Targa (Tipo 991) supone una vuelta a los orígenes de este modelo con techo practicable, aunque con las innovaciones tecnológicas del Siglo XXI. La marca alemana presentó el primer 911 Targa en 1965, con un techo desmontable de una pieza que el conductor podía quitar manualmente y guardar en el interior del vehículo. Esta solución siguió empleándose hasta que el Porsche 911 Targa (Tipo 993) introdujo un nuevo techo practicable de cristal que se deslizaba de forma eléctrica hasta escamotearse bajo la luneta trasera.
Ahora, la séptima generación del Porsche 911 Targa retoma la idea original, con un techo desmontable de una sola pieza, aunque se esconde en la parte trasera de forma completamente automática. Para ello cuenta con un nuevo mecanismo que levanta su peculiar luna trasera redondeada y desplaza el techo hacia atrás hasta escamotearlo bajo dicha articulación, en escasos 20 segundos y con la facilidad de apretar un simple botón eléctrico.
El techo practicable (confeccionado con dos piezas de magnesio que sujetan su cubierta de lona) y el arco central antivuelco (con embellecedor de aluminio y la inscripción “Targa”) también forma parte de los detalles propios que presentó esta versión hace ya cinco décadas.
Por los demás, el Porsche 911 Targa comparte todas las características mecánicas con el resto de los modelos de la Gama 911(carrocería ligera, motores bóxer de seis cilindros, cajas de cambio de siete marchas, suspensiones, frenos y dirección electromecánica) y está disponible exclusivamente en versiones Targa 4 y Targa 4S (con tracción a las cuatro ruedas “PTM”), como ocurría en la anterior generación (Tipo 997).
El Porsche 911 Targa 4 cuenta con el propulsor bóxer 3.4 de 350 CV de potencia, mientras que el 911 Targa 4S lleva el motor bóxer 3.8 de 400 CV, con el que alcanza una velocidad máxima de 296 km/h y acelera de 0 a 100 km/h en 4,6 segundos con el cambio automatizado “PDK” (4,4 segundos con el paquete “Sport Chrono” opcional).
La carrocería de las versiones Targa está confeccionada a partir de la empleada en las versiones Cabriolet, con las modificaciones pertinentes realizadas en su techo específico. Los refuerzos empleados han llevado el peso en vacío hasta los 1.540 kg en el Targa 4 y 1.555 kg en el Targa 4S (20 kg más con el cambio “PDK” de doble embrague robotizado), lo que supone un incremento de 40 kg respecto a las versiones similares con carrocería Cabriolet y nada menos que 110 kg más pesado que los 911 Carrera 4 y Carrera 4S Coupé.
La verdad es que sorprende que las versiones Targa estén disponibles exclusivamente con el sistema de tracción total “PTM”, porque en configuración de propulsión trasera serían en torno a 50 kg más ligeros (mejora de prestaciones y consumo) y no parece un modelo en el que la tracción total resulte imprescindible para el cliente.
Las primeras unidades de los nuevos Porsche 911 Targa 4 y Targa 4S llegarán a los concesionarios españoles en mayo de 2014, con un precio de 125.973 y 142.806 euros respectivamente.
El nombre “Targa” está tomado de la famosa carrera italiana “Targa Florio”, en donde los coches de Porsche obtuvieron importantes éxitos deportivos en la década de los 60. Además, se da la circunstancia de que “targa” significa “escudo” en italiano, simbolizando así el escudo protector que aporta el arco antivuelco característico de los Porsche 911 Targa, un modelo que combina los placeres de conducción de un coche “descapotable” con la seguridad de un modelo coupé.