El Toyota FT-1 Concept bien podría ser el hermano mellizo del Lexus LFA, con el que comparte filosofía, concepto (cupé, súper deportivo, motor delantero central, propulsión trasera, cambio robotizado, interior biplaza…) e incluso cierto estilismo.
Pero, de momento, no es más que un “coche concepto” presentado en el Salón de Detroit 2014 (13 al 26 de enero), un ejercicio de estilo muy real que no llegará nunca a los concesionarios, aunque desvela ciertos rasgos de diseño que recibirán los futuros deportivos de la marca japonesa. Su dibujo ha salido del Centro de Diseño de Toyota en California (“Calty Design Research”) y su denominación proviene de “Future Toyota” (“FT”) en combinación con el número 1 (que significa “el definitivo”).
Los pronunciados aditamentos aerodinámicos, sus amplias tomas de refrigeración, los remarcados pasos de rueda, el evolucionado difusor posterior, sus peculiares retrovisores exteriores y el alerón trasero retráctil son los principales detalles que marcan su aspecto exterior, rematado con una ventana practicada sobre el capó que deja su motor a la vista y unas enormes llantas de aleación de 21 pulgadas de diámetro, con neumáticos en medida 245/35 R21 delante y 305/30 R21 detrás. Tan desafiante expresión curvilínea no es más que una interpretación futurista que evoca las formas del deportivo Toyota 2000GT lanzado en 1967.
El propulsor del Toyota FT-1 está ubicado longitudinalmente y centrado por detrás del eje delantero, aunque Toyota no desvela ningún dato sobre sus características mecánicas, tan solo que está asociado a una transmisión automática (con levas de cambio secuencial detrás el volante) y propulsión trasera. Sea como sea, dicho motor debe ser realmente potente, a tenor del evolucionado equipo de frenos que lleva, con cuatro discos flotantes ventilados y perforados que están mordidos por pinzas fijas de seis pistones delante y cuatro pistones detrás.
Su habitáculo biplaza recibe a los pasajeros en unos estilizados asientos de tipo bacquet y la fibra de carbono empleada en los paneles interiores de las puertas, el aro del volante y la cúpula de la instrumentación delatan su condición de deportivo extremo.
El diseño envolvente del puesto de conducción simplifica al máximo la disposición de los mandos. El botón de arranque se ha colocado en el volante, que a su vez cuenta con diferentes mandos multifunción de fácil manejo para el conductor.
Con la intención de facilitar la visualización de todo lo que está ocurriendo en el vehículo, la instrumentación del Toyota FT-1 se proyecta en color sobre un cristal que está situado a la altura de la vista del conductor, mientras que una pantalla adicional muestra las indicaciones y gráficos del equipo multimedia. Además, en la parte superior del aro del volante, se han colocado también varios “display” indicadores de la marcha engranada y el programa de conducción seleccionado por el conductor: “Normal”, “Sport” y “Wet” (“Mojado”).