El Ferrari P80/C bien podría ser la “berlinetta V8” confeccionada por la marca del “Cavallino” para las carreras del futuro, pero es ya una realidad en 2019.
Los ingenieros de Maranello han llevado su tecnología a un extremo aún superior, desarrollando un coche con especificaciones de competición, que presenta un evolucionado estudio aerodinámico y un chasis puesto a punto para “volar bajo” por los circuitos más rápidos del mundo.
Lo más curioso es que el Ferrari P80/C es un coche único, una sola unidad fabricada y montada a mano para satisfacer el capricho de un cliente exclusivo, cuyas instrucciones específicas han sido recogidas en el pliego de condiciones que ha dado forma a semejante prototipo de carreras.
El “Centro de Estilo Ferrari” y el equipo de ingeniería y aerodinámica de Ferrari han trabajado mano a mano con el acaudalado propietario para satisfacer un sueño llevado a la realidad, desafío aún mayor teniendo en cuenta que el cliente es un gran conocedor del mundo Ferrari y coleccionista de los deportivos de la marca desde hace varias décadas.
El concepto básico era crear un prototipo moderno inspirado en modelos icónicos de carreras como los Ferrari 330 P3 / 330 P4 y el Ferrari Dino 206 S de 1966, pero también influido por los Ferrari Dino 206 GT / Dino 246 GT de carretera, desafío en el que rápidamente se implicaron con sus bocetos los mejores estilistas del “Centro Stile Ferrari”, encabezados por Flavio Manzoni (Director de Diseño de Ferrari).
El chasis del Ferrari 488 GT3 de competición ha servido como base de partida en la fabricación del Ferrari P80/C, pero el concepto estilístico y aerodinámico ha recibido un planteamiento completamente nuevo en el exclusivo modelo.
Sin estar sujetos a ningún tipo de restricciones (como impone el reglamento técnico de la categoría GT3), los especialistas de Ferrari han llevado la evolución aerodinámica del Ferrari P80/C a un extremo superior, siendo capaces de incrementar su eficiencia aerodinámica un 5 % respecto al coche de carreras homologado del que deriva.
Así pues, se ha empleado íntegramente el concepto aerodinámico de los bajos del Ferrari 488 GT3, pero toda la parte superior de la carrocería recibe nuevas soluciones que permiten optimizar el trabajo aerodinámico del nuevo Ferrari P80/C, incluido un nuevo alerón con forma de “T” introducido en la parte trasera del techo, elemento que está inspirado en el alerón adicional empleado por los Ferrari SF70H de Fórmula 1 en 2017.
A nivel mecánico, el Ferrari P80/C cuenta con el potente propulsor 3.9 V8 biturbo empleado en el Ferrari 488 GT3, que desarrolla 600 CV de potencia a 7.000 rpm y un par motor de 700 Nm a 6.000 rpm (670 CV y 760 Nm de serie, sin la brida de admisión restrictora impuesta por el reglamento FIA).
Toda la potencia pasa a las ruedas traseras, a través de una caja de cambios secuencial de seis velocidades con accionamiento semi-automático (mediante unas levas situadas detrás del volante), que tiene dientes rectos y una ligera carcasa fabricada en magnesio, además de contar con un diferencial autoblocante ajustable en precarga, que trabaja conjuntamente con el control electrónico de tracción “TC” y el sistema antibloqueo de frenos “ABS” (ambas ayudas electrónicas regulables por el conductor desde el interior, con distintos programas de ajuste).
A partir del chasis monocasco de aluminio y sus correspondientes subchasis delantero y trasero, todos los paneles de carrocería, elementos aerodinámicos y revestimientos exteriores e interiores están realizados en fibra de carbono, aligerando así el conjunto al máximo. En Ferrari no declaran el peso en vacío del P80/C, aunque no debería diferir mucho del alcanzado en el Ferrari 488 GT3 (1.260 kilogramos).
Las suspensiones independientes cuentan con articulaciones mediante rótulas, muelles helicoidales ajustables en precarga, barras estabilizadoras regulables en flexibilidad y amortiguadores de cuatro vías (“Multimatic DSSV GTLM”) que permiten adaptar la configuración precisa en compresión y extensión.
Como en el Ferrari 488 GT3, el equipo de frenos del Ferrari P80/C cuenta con discos de fundición gris y pinzas de aluminio desarrollados por los especialistas de Brembo. Los cuatro discos ventilados y ranurados tienen construcción flotante y una medida de 390 x 35 mm (diámetro x espesor) en el eje delantero y 332 x 32 mm en las ruedas traseras, mordidos respectivamente por pinzas fijas monobloque de seis pistones delante y cuatro pistones detrás (ver ficha técnica completa).
También hereda del coche de carreras las dimensiones de los neumáticos Pirelli P Zero de tipo “slick” (sin dibujo), en medida 30/68 R18 delante y 31/71 R18 detrás, aunque montadas en unas llantas de 18 pulgadas con diseño específico de cinco radios y fijación monotuerca.
El interior del Ferraro P80/C es prácticamente idéntico al del coche de carreras del que deriva, con todos los elementos realizados en fibra de carbono y barras de seguridad reforzando la rigidez y la seguridad del vehículo en caso de colisión.
No obstante, la parte derecha del salpicadero y los paneles de puerta reciben un diseño específico en el exclusivo prototipo, además de incluir un asiento bacquet adicional en el lado del copiloto que no lleva el coche en carreras, en ambos lados con cinturones de arnés con seis puntos de fijación y un tapizado específico en color azul.
El proyecto del Ferrari P80/C arrancó en 2015 y ha ocupado la fase de desarrollo más larga entre los “One-off” (coches únicos) realizados por Ferrari hasta la fecha, ocupando un ingente trabajo de investigación y desarrollo al que se han sumado minuciosas horas de trabajo en el túnel de viento y pruebas de puesta a punto de su evolucionado chasis en circuitos como Fiorano y Adria (ver video).