Mojado aumenta la emoción. GP de China 2017
Cuando Lewis Hamilton (Mercedes) pasaba bajo la bandera de cuadros del GP de China 2017, marcando su victoria nº 54 y el tercer “Grand Chelem” de su carrera deportiva, lo hacía para demostrar que ni él ni su Mercedes han perdido ni un ápice de su competitividad, por más que resulte también evidente la notable mejoría de sus rivales más próximos.
Un año más, el polucionado “gris China” ha sido el color dominante del fin de semana. Los entrenamientos libres del viernes estuvieron tan pasados por agua que no se pudo celebrar la segunda sesión (por razones de seguridad, al no poder volar los helicópteros). Les siguieron ya el sábado los “Libres 3” y la “Qualy”, disputados sobre asfalto seco pero con la expectativa de tener que volver a los poco experimentados neumáticos de lluvia, que la previsión meteorológica pronosticaba para la carrera.
Una vez más, Lewis Hamilton (Mercedes) destapó la quintaesencia de su Mercedes AMG F1 W08 EQ Power + y marcó un incontestable crono de 1 m 31,678 s, récord absoluto del circuito de Shangai. Distanciaba así en casi dos décimas al también rapidísimo Ferrari SF70H de Sebastian Vettel, que se situaba por delante de Valtteri Bottas (Mercedes) y Kimi Räikkönen (Ferrari), copiando los cuatro la misma formación de salida del anterior GP de Australia.
Tras ellos se posicionaban Daniel Ricciardo (Red Bull), Felipe Massa (Williams), Nico Hülkenberg (Renault), Sergio Pérez (Force India), Daniil Kvyat (Toro Rosso) y Lance Stroll (Williams) completando las diez primeras posiciones de parrilla de salida.
Carlos Sainz Jr (Toro Rosso) se quedaba a las puertas de la “Q3” mientras que Fernando Alonso (McLaren) colocaba su monoplaza en la decimotercera posición, asegurando que había vuelto a desplegar todo su mejor pilotaje de doble campeón para conseguir tan modesta plaza.
El domingo se cumplió la previsión y el asfalto de Shangai estaba resbaladizo pero no impracticable, haciendo innecesario un procedimiento de salida que ya no contempla la obligación de hacerlo tras el “Safety Car”. Algo vamos mejorando. (Si quieres conocer los cambios introducidos en la normativa 2017 pincha aquí).
Aunque los neumáticos “intermedios” de lluvia parecían el calzado más apropiado para el momento, Carlos Sainz Jr (Toro Rosso) era el único dispuesto a jugarse el todo por el todo y tomaba la valiente decisión de salir a carrera con neumáticos “súper blandos” de seco.
Era una moneda al aire que podía arrastrarle a la retirada o llevarle a la gloria de colocar su monoplaza donde solo habitan los inmortales.
Arrancaba la prueba y la estela de agua levantada por los primeros, sin ser muy cegadora, se lo ponía difícil a todo el que no tenga lo que hay que tener en este oficio.
No hay dudas de que Fernando Alonso (McLaren) lo tiene y adelantaba así varios puestos, igual que Max Verstappen (Red Bull), que hundido en el fondo de la parrilla desde la “Q1” del sábado, se convertía en un relámpago que lo catapulta hasta el quinto puesto, mientras aparece el Safety Car Virtual en el segundo giro.
El toque entre Lance Stroll (Williams) y “Checo” Pérez (Force India) ponía sobre la pista el “Safety Car Virtual” y se producía entonces una estampida en el “pit lane” para cambio de neumáticos.
Poco después, el verdadero “Coche de Seguridad”, pilotado por Bernd Mäylander, debía entrar en pista tras el espectacular accidente de Antonio Giovinazzi (Sauber) en la vuelta 4, que dejaba el coche en medio de la recta de meta.
Era el momento que aprovechaba Lewis Hamilton (Mercedes) para cambiar también a “súper blandos” y corregir un nuevo error de estrategia que, como en Australia, podría haber arruinado su escapada.
Una vez restablecido el orden en la cabeza, serían varios los lances que convertían la prueba en una sucesión de combates cuerpo a cuerpo, donde el Mercedes de Lewis Hamilton no ha tenido que hacer nada más que aquello para lo que está diseñado, ir por delante y mantener la ventaja frente a Sebastian Vettel (Ferrari).
Por detrás, la lucha parecía más entretenida y Max Verstappen (Red Bull) se batía en la pista contra Kimi Räikkönen (Ferrari) y Daniel Ricciardo (Red Bull) por una plaza en el podio, seguidos de cerca por un Valtteri Bottas (Mercedes) que había quedado en “tierra de nadie”, tras cometer un error durante la salida del “Safety Car” (daba un trompo al tratar de calentar los neumáticos).
En una línea más retrasada se agrupaban pilotos como Carlos Sainz Jr (Toro Rosso), Felipe Massa (Williams), Sergio Pérez (Force India) y Fernando Alonso (McLaren), demostrando lo que cada uno de ellos lleva dentro.
Lástima que la máquina del asturiano sea como es, en su tercera y frustrante versión, llevándole al segundo abandono consecutivo y robándole la posibilidad de conquistar unos puntos que serían de los más valiosos de su ya larga aventura en la Fórmula 1.
Sin lucha verdadera por la cabeza, la prueba consumía sus 56 giros en escaramuzas varias que le quitaban la etiqueta del aburrimiento y Lewis Hamilton (Mercedes) subía a lo más alto del podio flanqueado por un satisfecho Sebastian Vettel (Ferrari) y un exultante Max Verstappen (Red Bull), que había remontado desde la décimo sexta posición de salida y cruzado la bandera de cuadros a tan solo 0,8 segundos de su compañero Daniel Ricciardo (Red Bull), ganando el galardón de “Driver of the Day” (“piloto del día”) votado por todos los aficionados.
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE CHINA 2017
1º Lewis Hamilton (Mercedes), 56 vueltas en 1 h 37 m 36,1 s
2º Sebastian Vettel (Ferrari), a 6,2 s
3º Max Verstappen (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 45,2 s
4º Daniel Ricciardo (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 46,0 s
5º Kimi Räikkönen (Ferrari), a 48,0 s
6º Valtteri Bottas (Mercedes), a 48,8 s
7º Carlos Sainz Jr (Toro Rosso-Renault), a 1 m 12,9 s
8º Kevin Magnussen (Haas-Ferrari), a 1 vuelta
9º Sergio Pérez (Force India-Mercedes), a 1 vuelta
10º Esteban Ocon (Force India-Mercedes), a 1 vuelta