Hamilton recupera la sonrisa. GP de Canadá 2015
En el GP de Canadá 2015, sobre el Circuito Gilles Villeneuve de Montreal, hemos vivido un regreso a la normalidad que estaba decantado desde su inicio, con los únicos alicientes de ver partir a Sebastian Vettel (Ferrari) y Felipe Massa (Williams) desde posiciones muy retrasadas en la parrilla de salida.
Lo ocurrido en el pasado GP de Mónaco dentro del Team Mercedes AMG F1 no debía repetirse y no se ha repetido. Lewis Hamilton (Mercedes) ha curado las heridas en su orgullo, dominando el fin de semana sin dar respiro a nadie.
Y, el resultado, no podía ser otro que una nueva victoria y la plena convicción de que el campeonato tendrá decantado el doblete campeón y subcampeón al filo del parón veraniego.
Todo lo demás, pequeñas luchas, divertidas luchas, entre pilotos que quieren divertirse, cuando llegan a entender que no hay nada que hacer frente a un adversario imbatible, al que solamente una pedrada fortuita podría derribar de su pedestal.
Con Vettel (Ferrari), Massa (Williams), Alonso (McLaren) y Button (McLaren) alejados de los primeros lugares de la parrilla, cada uno en su circunstancia, las primeras posiciones de salida las ocuparon Hamilton (Mercedes), Rosberg (Mercedes), Räikkönen (Ferrari), Bottas (Williams), Grosjean (Lotus), Maldonado (Lotus), Hulkenberg (Force India), Kvyat (Red Bull), Ricciardo (Red Bull) y Sergio Pérez (Force India).
Con tiempo primaveral, sin lluvia y sin “Safety Car”, el trazado de la Isla de Notre Dame es ideal para acelerar y frenar, volver a acelerar y volver a frenar… una veloz monotonía en donde resulta relativamente fácil adelantar, sobre todo cuando unos aventajan a otros en 30 km/h de velocidad punta.
Con todo esto se configuraba una carrera totalmente previsible, con Lewis Hamilton (Mercedes) mandando sobre Nico Rosberg (Mercedes) y pastoreando a distancia el inquieto rebaño.
Por detrás, en los confines de la clasificación, presenciábamos un nuevo y brutal bofetón de la realidad a las ilusiones de dos campeones como, Fernando Alonso y Jenson Button (McLaren), retirados en las vueltas 47 y 58 respectivamente.
¿Qué está ocurriendo realmente en el equipo McLaren- Honda? Curiosamente, la respuesta la ha encontrado este viejo aficionado en las propias páginas de Autolimite.com, en una entrevista realizada recientemente a Luis Moya, dentro del blog “Pie en la tabla”. Lo tenéis blanco sobre negro en la respuesta del entrevistado a la primera pregunta: ¿Qué tienen los Volkswagen Polo R WRC para ser tan superiores al resto?
Respuesta de Luis Moya: “…Cuando empiezas a desarrollar un coche (aquí viene la clave fundamental), si te equivocas y te vas separando de la línea adecuada, luego no hay atajos y te obliga a empezar de nuevo, perdiendo mucho tiempo y mucho dinero”.
Desconocemos qué vio o qué le contaron a Fernando Alonso y su entorno en Japón y en Woking. También desconocemos la verdadera naturaleza de las circunstancias que le llevaron a salir de Ferrari, pero lo único cierto, hasta ahora, es que parecen estar cada día más alejados de su meta.
Fernando Alonso, lo he escrito en repetidas ocasiones, tuvo que salir de un desfiladero por la parte más abrupta y se ha metido en un laberinto.
Si se confirma la apariencia, si hubieran de regresar al punto de partida, sería con toda probabilidad una tarea larga, una experiencia agotadora, en la que el tiempo podría ser, también, un factor determinante.
Ya falta cada vez menos para conocer si el proyecto de McLaren-Honda ha estado bien orientado desde el principio o si, en vez de un rumbo de convergencia al éxito, aumentan cada día más los grados de separación, esos que llevan a la nada. Entonces será el momento de volver a recordar la respuesta de Luis Moya.
Con las 70 vueltas agotadas en este GP de Canadá, Lewis Hamilton (Mercedes) firmaba su cuarta victoria sobre siete en lo que va de temporada. Tras él, Nico Rosberg (Mercedes), quizás resignado a su papel de acompañante, pese a sus dos victorias en España y Mónaco, mientras que Valtteri Bottas (Williams), completaba el podio y compartía el champán de los triunfadores.
Tras ellos, finalizaban Kimi Räikkönen y Sebastian Vettel, pilotando ese Ferrari que les lleva a la esperanza, aunque insuficiente para el asalto definitivo al poder, con el resto de pilotos divirtiéndose y creando cada uno sus propias metas y objetivos.
Los próximos Grandes Premios serán determinantes para conocer hasta qué punto el rumbo iniciado en la larga travesía de Fernando Alonso encontrará la salida del laberinto y nos devolverá la emoción de nuevos retos, en una Fórmula 1 que pugna por reinventarse.
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE CANADÁ 2015
1º Lewis Hamilton (Mercedes), 70 vueltas en 1 h 31 m 53,1 s
2º Nico Rosberg (Mercedes), a 2,3 s
3º Valtteri Bottas (Williams-Mercedes), a 40,6 s
4º Kimi Räikkönen (Ferrari), a 45,6 s
5º Sebastian Vettel (Ferrari), a 49,9 s
6º Felipe Massa (Williams-Mercedes), a 56,3 s
7º Pastor Maldonado (Lotus-Mercedes), a 1 m 06,6 s
8º Nico Hulkenberg (Force India-Mercedes), a 1 vuelta
9º Daniil Kvyat (Red Bull-Renault), a 1 vuelta
10º Romain Grosjean (Lotus-Mercedes), a 1 vuelta
martes, 9 junio 2015 a las 11:34
Buenos días abuelete, gracias por la crónica.
Por favor que alguien haga algo para darle prioridad a la velocidad natural, al talento puro. Que los pilotos estén apretando el 80% del tiempo de carrera. Que la gestión de neumáticos y frenos siga como parte de la carrera pero sin tanto protagonismo. Quiten la gestión de consumo de combustible. Sinceramente me parece ridículo poner a estos pilotos a ahorrar combustible sencillamente ridículo. Ves una carrera y no sabes si un piloto ataca o se defiende, no sabes si está ahorrando o tiene un problema o simplemente es lento en ese circuito. No se puede estar ahorrando combustible media carrera por el amor de dios!!. Esto no es F1. Esto es aburrido Sr. Eccleston y Srs. miembros de la FIA, esto es muy engañoso. No hay competición de velocidad, hay competición de supervivencia.
No seré yo quien dé ideas para reflotar este deporte, pero tienen un buen puñado de buenas temporadas para fijarse y aprender de ellas.
Me he aburrido en este GP, me da igual que haya mil adelantamientos con DRS, son previsibles, son aburridos. Me he indignado cuando parecía que Rosberg iba a dar caza a Hamilton y veríamos un cuerpo a cuerpo y todo quedó en mensajes de radio de “cuidado no te acerques, gestiona esto y lo otro”.
La temporada pasada se salvó por los duelos entre los Mercedes y porque Ricciardo en su Red Bull de vez en cuando daba espectáculo. Este año curiosamente no vemos ningún duelo en Mercedes. Ferrari está mejor que el año pasado, lo cual no era difícil pero aún no está para competir con Mercedes. Williams y Red Bull han dado un paso hacia atrás, Mclaren no está ni va a estar este año.
Sinceramente se me están quitando las ganas de ver otro gran premio este año….
Al final nosotros también nos tenemos que poner nuestras propias metas y objetivos para divertirnos: Que Sainz gane a Verstapen, que Mclaren acabe un GP y empecemos a ver las prometidas mejoras. Que Ferrari o Williams se acerquen a Mercedes, Que Renault mejore su motor….
Pobres objetivos para lo que debería ser la categoría reina del automovilismo.
Buena semana a todos
Alberto
miércoles, 10 junio 2015 a las 7:43
¡¡AMEEEEENNNNNNNNNNN!! ALBERT..
Es duro de verdad lo que está ocurriendo en este campeonato cuando al ponerte sobre el teclado y el folio en blanco tienes que decidir entre la sobrada sonrisa de Hamilton o el vagar impreciso de los pilotos de McLaren por las tinieblas de su laberinto.
Por muchos esfuerzos que realicemos para comprender las razones que han llevado a una reglamentación tan absurda en una competición donde debería primar la VELOCIDAD Y LA LUCHA, lo que están haciendo con ella es incomprensible y lo estamos pagando TODOS.
Desaparecido el ingrediente de «ruido y furia» al que este Abuelete considera uno de los más importantes para entender la pasión que, durante décadas, nos arrastraba a los circuitos, este breve remedo de competición nos aburre hasta el hastío y cada vez hay menos tiempo y posibilidad de volver a enganchar a las masas. No me quiero decepcionar, pero es en verdad, decepcionante. Buena semana para ti y para todos. Nada me gustaría tanto como poder contar verdaderas batallas, no perdamos, todavía, la esperanza.
sábado, 13 junio 2015 a las 21:58
Creo que no habia perdido la confianza en si mismo, simplemente el error fue gordo y a lo mejor estaba teniendo un poco de vergüenza por lo acahecido.
Yo creo que ste mundial es casi suyo si gana Austria, Inglaterra y Monza casi seguro se llava el gato al agua.
Rosberg no me parece lo bastante fuerte a nivel psicologico como para aguantar mucho más. Lastima porque es simpatico pero para ganar el mundial eso no sirve.
lunes, 15 junio 2015 a las 16:21
Hombre, Jordi, bienvenido a este espacio del Abuelete del M3 en Autolímite, te situaba en la Selección de fútbol celebrando lo de Bielorrusis, jajaja…
Tienes mucha razón en tu comentario, no era pérdida de confianza en sí mismo, de eso va sobrado Lewis Hamilton, era mitad cabreo por el error y un poquito de «mosqueo» por si alguien estaba pensando en hacer algún paripé con el propósito de añadirle falsa emoción al campeonato. Si gana esas tres pruebas, antes, incluso, tenemos ya triple campeón.
Mientras F. Alonso se ve obligado a sufrir una penitencia con más «padrenuestros» de los que esperaba, pero las cosas en el deporte, como en la vida, son así…Un saludo muy cordial y aquí tienes un espacio para lo que gustes.