Plata sobre plata. GP de Austria 2015
Ni el mismísimo Steven Spielberg podría superar la puesta en escena con la que la marca anfitriona consigue crear ambiente en el denominado “Red Bull Ring”, como aperitivo previo a la disputa de su Gran Premio, en ese lugar llamado Spielberg, situado en el corazón de la verde Estiria austríaca.
En la pista, a buena velocidad, varios bólidos legendarios, conducidos todos ellos por pilotos de leyenda a los que los años les podría haber aumentado un par de tallas del mono de competición, caso de Niki Lauda, pilotando el McLaren-TAG Porsche MP4/2 con el que alcanzó sus últimos laureles en 1984.
Con él, Alain Prost (McLaren-TAG Porsche MP4/2 C), Riccardo Patrese (Renault RE50 Turbo), Gerhard Berger (Ferrari F1-87/88C), Jean Alesi (Sauber C14), Pierluigi Martini (Minardi-Motori Moderni M187) y Nelson Piquet (Brabham-BMW BT52), manteniendo la misma talla. Y, todos ellos, con el mismo brillo en la mirada y algunas arrugas más en su rostro de Césares vencedores, vestigios de una época de la Fórmula 1 hoy añorada por todos.
El dominio aplastante del actual equipo “Mercedes AMG F1” es reflejo fiel del que la misma marca ejerció sobre sus rivales siempre que se propusieron la meta de imponer su tecnología, unas veces como marca y otras, además, como país.
Resulta imposible evitar esta evocación cuando, en el aire, antes de que aparezca una avioneta acrobática del Team Red Bull, son dos bellos cazas americanos de la II Guerra Mundial, el P38 “Lightning” y un F4 ”Corsair”, los que simulan un pacífico combate en el que, afortunadamente, no hace acto de presencia ningún Messerschmitt Bf-109 de la Luftwaffe. Sería demasiado.
Pero, en esta ocasión, lo que hemos venido a vivir es una carrera de Fórmula 1 que tuvo en su “qualy” del sábado momentos de verdadera emoción, con una “Q1” en donde la mojada pista concedía el liderato por breves segundos a casi todo aquel que lo intentaba.
En el desbarajuste creado por la lluvia previa, vimos un extraño Lewis Hamilton (Mercedes) en el 13º lugar, Fernando Alonso 15º (McLaren) y, al otro lado del corte, dos campeones del mundo, Jenson Button 17º (McLaren) y Kimi Räikkönen 18º (Ferrari), sin la opción de disputar las tandas siguientes.
Si en las “Q1” y “Q2” mandaba Nico Rosberg (Mercedes), en la “Q3” era Lewis Hamilton, recuperado de su aparente apatía, el que marcaba la “pole position” definitiva, en un final cargado de suspense, con un trompo del piloto británico y una salida de pista de Rosberg. Tras ellos se situaban Sebastian Vettel (Ferrari), Felipe Massa (Williams), Nico Hulkenberg (Force India), Valtteri Bottas (Williams), Max Verstappen (Toro Rosso), Felipe Nasr (Sauber), Romain Grosjean (Lotus) y Pastor Maldonado (Lotus), hasta completar las diez primeras posiciones de salida.
Con una parrilla en donde, obligados por errores y circunstancias, conviven en los últimos lugares algunos campeones del mundo con pilotos recién llegados, podía ocurrir y ocurrió que, en las primeras curvas del trazado, la agresividad de Räikkönen (Ferrari) y unos neumáticos aún fríos provocaran un lance de carrera, que terminaría con el McLaren-Honda de Fernando Alonso mirando al cielo, montado en la grupa del Ferrari del finlandés.
Por delante, asistíamos a una salida rugiente de Nico Rosberg (Mercedes), dispuesto a disputarle la supremacía al impreciso Lewis Hamilton de este fin de semana.
Una vez que el rubio piloto alemán se situaba en cabeza, todo lo demás, hasta la bandera de cuadros, han sido las habituales y “divertidas batallitas entre vecinos” con las que debemos conformarnos los aficionados, en este segundo año triunfal de la escuadra de Brackley.
Por mucho que el resto lo intente, en la actualidad se vuelve a repetir el aplastante dominio que protagonizaron las primeras “Flechas de Plata” en la época de los Grand Prix de la anteguerra y la postguerra, aquellas dos temporadas (1954 y 1955) en las que, Juan Manuel Fangio y Stirling Moss, volvieron a llevar la segunda generación plateada a la victoria, con una racha de triunfos incontestable, prematuramente apagados por la tragedia de las 24 Horas de Le Mans de 1955 y posterior retirada de la escudería alemana (hasta su regreso en 2010).
La bandera ajedrezada del GP de Austria 2015 reflejaba una nueva victoria de Nico Rosberg (Mercedes) frente a su compañero Lewis Hamilton (Mercedes), completando el podio un consistente Felipe Massa (Williams) que salía beneficiado del deficiente “pit stop” que le realizaban a Sebastian Vettel los mecánicos de Ferrari.
A continuación, bastante alejados, cruzaban la meta Valtteri Bottas (Williams) y Niko Hulkenberg (Force India), pletórico tras su fantástico triunfo la semana anterior en las 24 Horas de Le Mans 2015.
Y, ya con vuelta perdida, finalizaba Pastor Maldonado (Lotus) en séptima posición, talonado por el joven y agresivo Max Verstappen (Toro Rosso), hoy mejor que su compañero Carlos Sainz Jr., retirado en la vuelta 38 por avería mecánica.
Completando la clasificación que suma puntos, terminaban Sergio Pérez (Force India) y Daniel Ricciardo, con un Red Bull que aparece olvidado ya de los días de gloria del pasado reciente, pero aún magnífico anfitrión en su propio refugio.
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE AUSTRIA 2015
1º Nico Rosberg (Mercedes), 71 vueltas en 1 h 30 m 16,9 s
2º Lewis Hamilton (Mercedes), a 8,8 s
3º Felipe Massa (Williams-Mercedes), a 17,5 s
4º Sebastian Vettel (Ferrari), a 18,1 s
5º Valtteri Bottas (Williams-Mercedes), a 53,6 s
6º Nico Hulkenberg (Force India-Mercedes), a 1 m 04,0 s
7º Pastor Maldonado (Lotus-Mercedes), a 1 vuelta
8º Max Verstappen (Toro Rosso-Renaut), a 1 vuelta
9º Sergio Pérez (Force India-Mercedes), a 1 vuelta
10º Daniel Ricciardo (Red Bull-Renault), a 1 vuelta
miércoles, 24 junio 2015 a las 11:03
Buenos días Abuelete,
No pude ver la carrera, me esperaba un fin de semana en Granada con mi mujer y mis peques, que disfruté mucho. Al fin y al cabo no se puede comparar una visita a la Alhambra con un GP de F1.
Estuve al corriente de lo ocurrido en calificación y en carrera a través de internet y creo que no buscaré un hueco para ver la carrera repetida.
Por cierto, creo que los hechos están dando la razón al Dr. Marko con Max Verstappen, desde luego es de esos pilotos que quieres ver en pista cuando te sientas a presenciar un GP. Aun tiene que aprender mucho pero es un talentazo y da mucho espectáculo.
Saludos y buena semana a todos
Alberto
miércoles, 24 junio 2015 a las 19:56
Realmente Alberto, no te perdiste nada, cualquier comparación con un día en La Alhambra con tu familia es imposible y poca crónica cabe cuando lo más interesante del GP es la Q1 y las «atracciones».
Respecto a Verstappen, totalmente de acuerdo. Ese chico, sobre un Mercedes sería sin duda el primer rookie campeón en el primer año, aquello que estuvo a punto de conseguir Hamilton en 2007…hay piloto y una juventud que hace parecer mayor (con solo 20 años) a su compañero y rival Carlos Sainz Jr., duro rival le ha salido a Carletes.
viernes, 26 junio 2015 a las 19:33
Hola! oye y qué le pasó a Alonso que se llevó por delante a Kimi??? Hombre ya está bien, eso no se hace.
Yo no vi la carrera pero estoy segura de que no fue culpa de mi Kimi. Tch, que va, ni hablar.
sábado, 27 junio 2015 a las 9:33
Hola Lourdes, tu Kimi ha cambiado mucho y no precisamente a bien. Conserva destellos, solo destellos de aquel fulgor de sus años buenos. Se pierde en su ensimismamiento y como consecuencia, demasiadas veces se ve obligado a salir desde muy atrás. Si hubieras visto la carrera (lo poco que duraron él y Alonso en la misma) lo comprenderías mejor, unas gomas frías que a la gente del final del pelotón les resulta más difícil calentar tras la arrancada, le llevaron zagueando , lo que se suele decir «de culo», hasta que Alonso, otro que no gana para desgracias últimamente, se lo llevó puesto y menos mal que tu Kimi, perro viejo, tuvo los reflejos de sacar las manos del volante, porque el fondo plano del McLaren le podía haber hecho la manicura, si se descuida. Besitos.
sábado, 27 junio 2015 a las 17:33
Ya sabía yo que lo ibas a dejar »bien peinao». Si se lo merece pues bien está. Besitos.