Ferrari llega para quedarse. GP de Bahréin 2017
“El retorno de Ferrari”, tercera temporada, podría ser el título de este “juego de tronos” donde Sebastian Vettel gritaba eufórico ¡¡Buona Pasqua!! tras cruzar triunfante la línea de meta en este GP de Bahréin 2017, en el que se ha materializado la existencia de una alternativa al dominio aplastante de las “Flechas de Plata”.
Los bólidos de Mercedes no dominaron las tandas libres y fue en la “Qualy” donde impusieron sus tiempos, superando Valtteri Bottas a su compañero por 23 milésimas de segundo en la primera “pole” desde su llegada a la Fórmula 1.
A sus espaldas, los habituales, Sebastian Vettel (Ferrari), Daniel Ricciardo (Red Bull), Kimi Räikkönen (Ferrari) y Max Verstappen (Red Bull), mientras que Nico Hülkenberg (Renault), Felipe Massa (Williams), Romain Grosjean (Haas) y Jolyon Palmer (Renault) completaban las diez primeras posiciones de parrilla.
Había que bajar hasta la 15ª posición de salida para encontrar a Fernando Alonso, con su McLaren-Honda montando una unidad propulsora a estrenar, aunque sin ninguna garantía sobre su potencia y fiabilidad. Tras él, se situaba el Toro Rosso-Renault STR12 de Carlos Sainz Jr, intentando entender los motivos por los que su bólido no acababa de entregarle lo que él esperaba.
Un trazado en medio del desierto puede ser un prodigio de iluminación, pero las arenas de las dunas son un elemento tan imprevisible como rebelde y el circuito de Sakhir lo sufre, al cubrirse su asfalto con una fina película de dicho elemento, capaz de variar la adherencia de los neumáticos y alterar su eficacia en aceleración y frenada.
Los primeros en sufrir sus efectos fueron el mismísimo Lewis Hamilton (Mercedes) y Daniel Ricciardo (Red Bull), que saliendo por la “zona sucia” de la parrilla vieron cómo les robaban la cartera en el envite de salida.
Mientras Valtteri Bottas (Mercedes) arrancaba sin sobresaltos, su compañero recibía el hachazo de Sebastian Vettel (Ferrari) en la frenada de final de recta. Lo mismo le ocurría a Daniel Ricciardo (Red Bull) a quien acosaba y superaba la ambición insaciable de Max Verstappen (Red Bull), dispuesto siempre a saltarse las normas y órdenes de equipo si las hubiera.
Sebastian Vettel (Ferrari) iniciaba en la vuelta 10 el baile de neumáticos y colocaba el compuesto “súper blando”, preparándose temprano para una agresiva estrategia que iba a dar sus frutos.
Max Verstappen (Red Bull) le seguía en la siguiente vuelta y con la misma monta, pero unos frenos demasiado castigados en los primeros lances de carrera le iban a dejar fuera de pista en el siguiente giro.
Tras dos o tres vueltas de frenético trabajo en el “pit lane”, Carlos Sainz Jr (Toro Rosso) volvía a pista con neumáticos frescos y se lanzaba al ataque de Lance Stroll (Williams), realizando una atrevida apurada de frenada que se llevaba por delante al monoplaza del piloto canadiense y dejaba a ambos en medio de la pista (le ha costado a Sainz una sanción de tres puestos en el próximo GP y dos puntos en su súper licencia).
Mientras el “Safety Car” hacía su aparición sobre el trazado, en el “pit lane” comenzaban a entrar todos los pilotos que aún no habían cambiado sus neumáticos, produciéndose aquí un golpe de suerte que resultaría clave en la estrategia de Sebastian Vettel (Ferrari) y en su posterior victoria.
Con las gomas cambiadas solo unas vueltas antes, Vettel se encontraba de repente en la primera posición, con su “cavallino” cabalgando líder cuando se retiraba el “Coche de Seguridad” y sus dos rivales de Mercedes situados por detrás, sin haber tenido que entrar en arriesgadas luchas.
A partir de ese momento, Sebastian Vettel se dedicaba a pilotar hacia la victoria con toda la rapidez que ahora le permite su ya competitivo Ferrari SF70H, aunque sin un instante de respiro ante el frenético empuje de sus directos rivales plateados.
Valtteri Bottas (Mercedes) parecía incapaz de asaltar el liderato de Vettel (el finlandés se quejaba de excesivo sobreviraje en su monoplaza) y debía escuchar por radio ese mensaje que ningún piloto quiere recibir, teniendo que ceder la segunda posición a un Lewis Hamilton (Mercedes) que empujaba con toda su fuerza para atacar al líder, aunque pasaba bajo la bandera de cuadros sin llegar al “cuerpo a cuerpo”.
Por detrás finalizaban Kimi Räikkönen (Ferrari) y Daniel Ricciardo (Red Bull), que en ningún momento tuvieron opciones de luchar por las posiciones del podio, mientras que Felipe Massa (Williams), Sergio Pérez (Force India), Romain Grosjean (Haas), Nico Hülkenberg (Renault) y Estaban Ocon (Force India) sumaban unos valiosos puntos para sus respectivos equipos.
Fernando Alonso (McLaren) se quejaba de pilotar el monoplaza con menos potencia de su carrera en la Fórmula 1 y empleaba su innegable categoría para no dejarse avasallar por los últimos del pelotón, a los que su palmarés y presencia incita al desafío.
Por tercera vez consecutiva, la deficiente unidad de potencia suministrada por Honda le dejaba fuera de carrera durante las últimas vueltas, en la misma semana en la que han hecho oficial la participación de Fernando Alonso en las míticas 500 Millas de Indianápolis 2017 y que podría suponer un giro de timón en “el incierto rumbo de Fernando Alonso” hacia la próxima temporada.
Entre tanto, las campanas de Maranello repican por la nueva victoria de Sebastian Vettel (Ferrari), que exultante de emoción deseaba a todos los “tifosi” una ¡¡Buona Pasqua!!
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE BAHRÉIN 2017
1º Sebastian Vettel (Ferrari), 57 vueltas en 1 h 33 m 53,3 s
2º Lewis Hamilton (Mercedes), a 6,6 s
3º Valtteri Bottas (Mercedes), a 20,4 s
4º Kimi Räikkönen (Ferrari), a 22,4 s
5º Daniel Ricciardo (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 39,3 s
6º Felipe Massa (Williams-Mercedes), a 54,3 s
7º Sergio Pérez (Force India-Mercedes), a 1 m 02,6 s
8º Romain Grosjean (Haas-Ferrari), a 1 m 14,8 s
9º Nico Hülkenberg (Renault), a 1 m 20,2 s
10º Esteban Ocon (Force India-Mercedes), a 1 m 35,7 s