El Porsche 911 alcanza un millón de unidades
El 11 de mayo de 2017 será recordado en los hitos históricos de Porsche como el día que salió de la planta de Zuffenhausen (Alemania) el Porsche 911 número un millón, un Carrera S en color especial “Irish Green” (“Verde Irlandés”) que continúa el patrón original de aquel primer Porsche 911 fabricado en 1963.
Siete generaciones después (911, Serie G, 964, 993, 996, 997 y 991), el Porsche 911 sigue siendo el modelo emblemático indiscutible de la marca alemana y más de un 70 % de los 911 fabricados siguen rodando por las carreteras de todo el mundo.
Pocos deportivos hay tan longevos como el Porsche 911, que con el paso de los años se ha convertido en algo más que un icono de la automoción, siendo un objeto de deseo admirado y pretendido por todos los conductores.
Una de las asignaturas pendientes de cualquier conductor te aseguro que es ponerse a los mandos de un Porsche 911. Conducir uno de estos modelos, en cualquiera de sus generaciones, supone algo especial, difícil de describir, por las sensaciones que transmite, por la calidad percibida que refleja, por la robustez que muestra en cualquier circunstancia y por el disfrute al volante que supone conducirlo.
Aquellas particulares reacciones de “todo atrás” que ostentó hasta la Serie 993 comenzaron a pasar a la historia en la Serie 996. El rudo y complicado deportivo, difícil de llevar hasta sus límites y exigente en su conducción a fondo, fue cambiando por completo tan rebelde carácter y el actual Porsche 911 de la Serie 991 sorprende por sus equilibradas reacciones y facilidad de conducción, incluso explorando sus límites (en buena medida gracias a las bondades de sus ayudas electrónicas o la facilidad de manejo de la caja automática “PDK”).
El mito del Porsche 911 se ha forjado también gracias a los numerosos éxitos obtenidos en las carreras, siendo el deportivo más laureado en el mundo de la competición. Más de la mitad de las 30.000 victorias obtenidas por Porsche en los campeonatos y pruebas realizadas en los cinco continentes han sido conseguidas por un Porsche 911.
Yo he tenido el enorme placer de haber podido correr con varios Porsche 911 diferentes y también contribuir al número de victorias sumadas por este icónico modelo: tres victorias con un Porsche 911 GT3 Cup (Serie 996) en el Campeonato de España de GT 2000.
Otros de mis coches de carreras fueron dos imponentes Porsche 911 GT2 (Serie 993), un 911 GT2 3.6 biturbo con unos 530 CV de potencia y un evolucionado 911 GT2 3.8 biturbo con cerca de 600 CV de pura bestialidad. Éste ha sido uno de los coches más exigentes y excitantes de pilotar con los que he corrido, puro carácter al servicio de la eficacia.
No alcanzo a imaginar las sensaciones que tienen que transmitir otros mitos de la competición como el Porsche 935/78 “Moby Dick” Grupo 5 (850 CV) o el Porsche 911 GT1/98 LM (650 CV), con los que Porsche marcó una época en las carreras de resistencia GT.
El Porsche 911 Carrera S un millón se quedará en Porsche AG y realizará una gira mundial por Estados Unidos, China, Escocia y Alemania (Nürburgring) antes de pasar a formar parte de la colección del Museo Porsche.
