Hamilton apunta hacia el título. GP de EEUU 2017
Tras la llegada a meta, Lewis Hamilton (Mercedes), Sebastian Vettel (Ferrari) y Max Verstappen (Red Bull), esperaban en la sala antes de entrar al podio, cada uno ensimismado en su propia reflexión sobre lo vivido en el circuito de Las Américas.
Lewis Hamilton apuntando ya hacia su cuarto título, el que le igualará a su rival Sebastian Vettel, al que ha vencido en un fin de semana donde ha dominado con la fuerza de su voluntad y la potencia inagotable de su “Flecha de plata”.
Sebastian Vettel sintiendo que las posibilidades de ganar su quinto entorchado se le están escapando, como un puñado de arena aventado por el soplo salvaje del viento que domina los grandes horizontes del estado de la estrella solitaria.
Y, Max Verstappen, enfebrecido aún por la adrenalina de un adelantamiento más allá del límite de la pista, con el que había doblegado a Kimi Räikkönen (Ferrari) en el último giro, como culminación de un Gran Premio donde, saliendo desde las últimas posiciones de la parrilla, ha vuelto a demostrar la furia de su irresistible afán de victoria.
Pero, en ese momento anterior a la apoteosis de los trofeos, aparecía Kimi Räikkönen para ocupar el tercer escalón del podio del que ha sido “descabalgado” el piloto holandés.
Los jueces de la FIA imponían una penalización “exprés” de cinco segundos a Max Verstappen, al considerar que había vulnerado el reglamento, colocando las cuatro ruedas de su Red Bull RB13 fuera del trazado durante la maniobra de adelantamiento al Ferrari de Räikkönen.
Con incredulidad en las miradas, llegaban las protestas de los perjudicados, al considerar arbitraria la forma de juzgar lances de carrera que se habían repetido sin sanción en varios momentos del Gran Premio y que serían la sal de la competición en esta Fórmula 1 que los nuevos dueños tratan de aliñar para recuperar aromas de otras épocas.
Tras los desastrosos resultados de la gira asiática, las huestes de Maranello confiaban en la matemática de los puntos en disputa, a veces tan caprichosa que no será la primera vez en que los pronósticos salten por los aires, recordando aquel 2007 donde Kimi Räikkönen consiguió para Ferrari su último campeonato, el que les regaló McLaren, con Fernando Alonso y Lewis Hamilton en plena gresca.
Pero, en Mercedes, no están dispuestos a regalar nada y pronto se comprobó que, para vencer a los de la estrella, hay que disponer de armas pesadas, algo que no parece tener la “Scuderia”, tampoco ésta temporada.
Ya antes de los enfrentamientos en pista, las noticias se centraban en la renovación de Fernando Alonso con el equipo McLaren para la temporada 2018, esperanzado en que los nuevos motores Renault le brinden la oportunidad de luchar por las posiciones que no le han dejado las unidades de potencia de Honda.
También se hacía efectiva la llegada de Carlos Sainz Jr al equipo Renault en este GP de EEUU, dejando como titular de Toro Rosso a Daniil Kvyat y la nueva incorporación de Brendon Hartley (piloto oficial del Porsche 919 Hybrid en las últimas temporadas del WEC) en el equipo filial de Red Bull.
Lewis Hamilton (Mercedes) conseguía su “pole” número 72 con un tiempo récord de 1 m 33,108 s y tras él se alineaban en parrilla Sebastian Vettel (Ferrari), Valtteri Bottas (Mercedes), Daniel Ricciardo (Red Bull), Kimi Räikkönen (Ferrari), Esteban Ocon (Force India), Carlos Sainz Jr (Renault), Fernando Alonso (McLaren), Sergio Pérez (Force India) y Felipe Massa (Williams), beneficiándose los cinco últimos de la penalización que relegaba a Max Verstappen (Red Bull) de la 6ª plaza a un lugar al fondo de la parrilla, tras cambiar distintos componentes mecánicos de su monoplaza.
Cuando se apagaron los semáforos rojos, Sebastian Vettel (Ferrari), proa al cielo, asaltaba el liderato con determinación en la primera frenada, superando con su “cavallino alado” a la “Flecha de plata” de Lewis Hamilton.
Este trazado tejano, donde Hermann Tilke se ha esforzado en reunir todas las variantes posibles para convertirlo en escenario de bellas disputas, no decepciona y de ahí que sea ya uno de los preferidos por los pilotos para entablar a lo largo de sus 5.513 metros las enconadas batallas que pudimos disfrutar en esta edición.
Lewis Hamilton (Mercedes), sin correr ningún riesgo especial, rebasaría en apenas cinco vueltas a Sebastian Vettel (Ferrari), que había intentado despegarse del británico sin conseguirlo. Con la tranquilidad que da sentirse el más fuerte, Hamilton navegaba entonces hacia un horizonte sin límites, dispuesto a derribar todos los récords establecidos en la F1.
Valtteri Bottas (Mercedes) y Daniel Ricciardo (Red Bull) protagonizaban otro espectacular duelo en el que emparejaban sus monoplazas repetidas veces, hasta que la mecánica del “aussie” perdía sus alas y le dejaba fuera de carrera, mientras Carlos Sainz Jr (Renault) atacaba con éxito a un Fernando Alonso (McLaren) que veía pocas vueltas después cómo su unidad de potencia le volvía a dejar tirado por décima ocasión en la temporada.
Entretanto, desde el fondo de la parrilla, Max Verstappen (Red Bull) había emprendido una feroz cabalgada que le acercaba, cada vez más, a los lugares de cabeza.
También peleaban Esteban Ocon (Force India) y Felipe Massa (Williams), mientras Carlos Sainz Jr, retirado Alonso, emprendía singular batalla, uno tras otro, con los dos pilotos de Force India (Esteban Ocon y Sergio Pérez).
En este fragor se iban consumiendo las 56 vueltas programadas, con estrategias predecibles y escaso movimiento para cambiar de neumáticos (todos los “pit stops”).
A pocos giros del final, Sebastian Vettel (Ferrari) conseguía ascender hasta la segunda posición, tras abrirle la puerta Kimi Räikkönen (Ferrari) sin mostrar la mínima resistencia. Lo que no imaginaba el piloto finlandés era el ataque frenético al que le iba a someter Max Verstappen (Red Bull) en la última vuelta, arrebatándole por unos instantes el tercer escalón del podio (hasta que fue penalizado).
Con Hamilton (McLaren), Vettel (Ferrari) y Räikkönen (Ferrari) subidos al podio, Verstappen (Red Bull) se debía conformar con la cuarta posición final, seguido por Valtteri Bottas (Mercedes), Esteban Ocon (Force India) y Carlos Sainz Jr (Renault), que volvía a realizar un brillante resultado y marcaba sus primeros puntos con su nuevo equipo.
Culminaba así este GP de EEUU 2017 en el que, controversias aparte, se están viendo nuevas formas de gestión del espectáculo, con ingredientes “made in USA” a los que deberemos acostumbrarnos, confiando en que consigan ofrecer nuevas cotas de diversión, entretenimiento y emoción.
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE EEUU 2017
1º Lewis Hamilton (Mercedes), 56 vueltas en 1 h 33 m 50,9 s
2º Sebastian Vettel (Ferrari), a 10,1 s
3º Kimi Räikkönen (Ferrari), a 15,8 s
4º Max Verstappen (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 16,7 s
5º Valtteri Bottas (Mercedes), a 34,9 s
6º Esteban Ocon (Force India-Mercedes), a 1 m 30,9 s
7º Carlos Sainz Jr (Renault), a 1 m 32,9 s
8º Sergio Pérez (Force India-Mercedes), a 1 vuelta
9º Felipe Massa (Williams-Mercedes), a 1 vuelta
10º Daniil Kvyat (Toro Rosso-Renault), a 1 vuelta
NOTA: Max Verstappen (Red Bull) cruzaba la línea de meta en tercera posición, pero los comisarios deportivos le penalizaban con 5 segundos de tiempo por haber sobrepasado los límites de la pista en su adelantamiento a Kimi Räikkönen (Ferrari) y obtener un beneficio con ello.
