Un radiante día de carreras. GP de Brasil 2017
Con su cuarto título de Campeón del Mundo de Pilotos de Fórmula 1 en el bolsillo, qué habría, excepto una nueva victoria, que pudiera motivar con más fuerza a Lewis Hamilton (Mercedes). El piloto británico saldría el último, desde la línea de bóxes, para disfrutar de una carrera donde el reto sería comprobar hasta dónde se puede escalar, antes de caer la bandera de cuadros, en un circuito tan vertiginoso como es el de Interlagos.
El trazado paulista, escenario desde 1939 de tantas gestas automovilistas que lo han convertido en un tótem de la competición, lucía espléndido, con las gradas llenas de vistosos colores que delimitaban sus falsas rectas y sus escapatorias. En una de ellas se dejaba Lewis Hamilton en el inicio de la “Q1” del sábado la posibilidad de anotarse una nueva “pole” (al estrellarse contra las protecciones de la curva nº 6), para incrementar otro récord de los pocos que aún se le puedan resistir.
Iba a ser su compañero en Mercedes, Valtteri Bottas, quien iba a compartir con el Ferrari de Sebastian Vettel la primera línea de parrilla y, tras ellos, se situarían Kimi Räikkönen (Ferrari), Max Verstappen (Red Bull), “Checo” Pérez (Force India), Fernando Alonso (McLaren) y los dos Renault de Nico Hülkenberg y Carlos Sainz Jr. Las últimas diez posiciones de salida las cerraban Felipe Massa (Williams), encarando una nueva despedida de la F1 que parece definitiva y Esteban Ocon (Force India).
Retrasado 10 puestos por sustituir elementos de su unidad de potencia, Daniel Ricciardo (Red Bull) saldría en la 14ª plaza, mientras Lewis Hamilton, tras su salida de pista en la “Q1”, debía arrancar desde “pit lane” (al aprovechar para cambiar la caja de cambios y otros elementos mecánicos de su Mercedes AMG F1 W08), garantizando así una apasionante expectativa de adelantamientos y espectáculo.
Tras el semáforo, la arrancada furiosa del “cavallino” de Sebastian Vettel (Ferrari) le colocaba por delante de Valtteri Bottas (Mercedes), mostrando la determinación del piloto alemán de consolidar ese subcampeonato que los resultados de la parte final de la temporada han convertido en la aspiración máxima posible de la “Scuderia” de Maranello.
El endiablado ritmo que impone en descenso las “eses” de Senna motivaban el contacto entre Kevin Magnussen (Haas), Stoffel Vandoorne (McLaren) y Daniel Ricciardo (Red Bull). Los dos primeros quedaban fuera de carrera por daños mecánicos, mientras Ricciardo debía pasar por el garaje para solventar los daños de su monoplaza y cambiar los neumáticos.
Pocas curvas después, en el mismo punto donde Hamilton (Mercedes) se había salido el día anterior, Romain Grosjean (Haas) se llevaba por delante a Esteban Ocon (Force India), dejando al piloto francés tirado en medio de la pista, sin opciones de continuar la lucha.
Entraba entonces en juego el “Safety Car” para imponer la calma. Tanto es así que Sebastian Vettel (Ferrari) redujo la velocidad casi hasta detenerse en el momento de retirarse el “SC”, volviendo a estirarse con furia cuando creyó obtener la máxima ventaja.
Fernando Alonso (McLaren), que había sorprendido a Sergio Pérez (Force India) en la arrancada, se veía rebasado por un Felipe Massa (Williams) que allí, ante su público, en el terreno de su despedida, nos brindaría una actuación sobresaliente, colaborando a que una carrera en la que ya no se disputaba nada determinante se convirtiera en brillante espectáculo de esta tórrida primavera brasileña.
Entre tanto, Sebastian Vettel (Ferrari) lideraba sin fallos y controlaba la proximidad de Valtteri Bottas (Mercedes), con Kimi Räikkönen (Ferrari) cubriéndoles las espaldas en la tercera posición y Max Verstappen (Red Bull) algo más descolgado.
Iban a ser Lewis Hamilton (Mercedes) y Daniel Ricciardo (Red Bull) los que protagonizaban una espectacular remontada desde las últimas posiciones, adelantando por dentro o por fuera a cualquiera que intentara oponerse.
Con buen criterio (la veteranía es un grado), Fernando Alonso (McLaren) no quiso obstaculizar la “Flecha de plata” que apareció en su retrovisor. Ya era bastante la bella disputa en la que estaban su McLaren-Honda y el Williams de Felipe Massa, manteniendo entre ellos un último lance de rivalidad al que se sumaba Sergio Pérez (Force India).
Estaban llegando las últimas vueltas y se estrechaban las ventajas, con Hamilton (Mercedes) apurando hasta lo inverosímil sus neumáticos, antes de poner el compuesto “súper blando” (todos los «pit stops«). Tras superar a Daniel Ricciardo (Red Bull), comenzaba el acoso a Kimi Räikkönen (Ferrari), que supo contener sin flaquezas las embestidas del cuatro veces campeón, en el mismo escenario donde en 2007, también él, el “Iceman” finlandés, había conquistado su corona.
Cuando se cumplieron las 71 vueltas del recorrido, los cuatro pilotos de cabeza (Vettel, Bottas, Räikkönen y Hamilton) pasaban bajo la bandera de cuadros con diferencias mínimas y tras ellos llegaban los dos Red Bull de Max Verstappen y Daniel Ricciardo algo más retrasados, mientras Felipe Massa (Williams), Fernando Alonso (McLaren) y Sergio Pérez (Force India) cruzaban la meta exprimiendo al máximo sus unidades de potencia y viéndose muy de cerca en los retrovisores.
Con vuelta perdida llegarían los dos Renault RS17, esta vez con Nico Hülkenberg (10º) por delante de Carlos Sainz Jr, ya fuera de los puntos.
Este viejo aficionado adivina, tras la visera, las sonrisas de satisfacción de todos los que, con casi todo decidido, han podido disfrutar en este GP de Brasil 2017, sin órdenes de equipo, pilotando pie a tabla en un radiante día de carreras.
CLASIFICACIÓN FINAL GP DE BRASIL 2017
1º Sebastian Vettel (Ferrari), 71 vueltas en 1 h 31 m 26,2 s
2º Valtteri Bottas (Mercedes), a 2,7 s
3º Kimi Räikkönen (Ferrari), a 4,6 s
4º Lewis Hamilton (Mercedes), a 5,4 s
5º Max Verstappen (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 32,9 s
6º Daniel Ricciardo (Red Bull-TAG Heuer Renault), a 48,7 s
7º Felipe Massa (Williams-Mercedes), a 1 m 08,9 s
8º Fernando Alonso (McLaren-Honda), a 1 m 09,3 s
9º Sergio Pérez (Force India-Mercedes), a 1 m 09,5 s
10º Nico Hülkenberg (Renault), a 1 vuelta