Cifra estratosférica para una maqueta de Mercedes
No seré yo quien me “meta” en qué gasta la gente su dinero, pero cuando la cosa va de coches, no puede uno evitar la opinión.
El precio en el que se valoran las cosas puede ser tan subjetivo como cada uno quiera, pero todo tiene un equilibrio y hay cosas que alcanzan precios insospechados, sobre todo cuando se le da el carácter de pieza única, que llamarlo “obra de arte” no procede.
Esto es lo que ha ocurrido con la maqueta del Mercedes G “Project Geländewagen” que ha sido subastada hace unos día por Sotheby’s con fines benéficos, lo que me hace pensar que su generoso comprador ha pensado más en dicha causa benéfica que en el valor real de la maqueta escala 1:3 que se ha llevado para casa.
El denominado “Project Geländewagen” era presentado hace tan solo un mes como una iniciativa conceptual en la que se aunaban los criterios estilísticos de Gorden Wagener (Jefe de Diseño de Mercedes-Benz) y Virgil Abloh (artista y diseñador de moda masculina para Louis Vuitton) para crear una “exclusiva” interpretación del Mercedes-Benz Clase G, el icónico todo terreno de la marca de la estrella que apenas ha cambiado las líneas de su diseño exterior desde que apareciera en 1978.
La original “genialidad” de ambos diseñadores no ha pasado de convertir un Mercedes-Benz Clase G en un prototipo de carreras, tomando como base de inspiración un potente Mercedes-Benz G 63 AMG con motor V8 4.0 Biturbo de 585 CV, aunque el resultado final no parezca ni siquiera capaz de rodar sobre el asfalto de un circuito, como sí lo hicieran en su día otros geniales prototipos como la Ford Transit Supervan 3 V8 (1994) o el Renault Espace F1 V10 (1995), ambos con motor de Fórmula 1 y soluciones de competición.
Por si fuera poco, como detalle estilístico distintivo, han tenido la idea de pulir la pintura en ciertas partes de la carrocería, creando un efecto que a mí me recuerda al que tiene un coche cuando está reparándose en el taller de chapa, justo antes de pasar a la cabina de pintura.
Lo más curioso todavía es que, según argumentan los autores, este proyecto conceptual “nació para explorar nuevas definiciones del lujo y del diseño”, en un coche que apenas ha cambiado sus formas en cuatro décadas de comercialización y que ha sido desprovisto de todo el equipamiento interior para transformarlo en versión de competición. Vamos, todo muy lógico.
En fin, que a este “Project Geländewagen” es difícil encontrarle la originalidad por ningún lado, más allá de lo sugerente que puede resultar cualquier vehículo con aletas ensanchadas, llantas grandes y aspecto de carreras.
Tan solo me queda aplaudir la finalidad benéfica del proyecto, cuya elevada cifra alcanzada en la subasta se va a destinar, en su totalidad, al fondo de becas “Post Modern” de Virgil Abloh, para apoyar a estudiantes afroamericanos de raza negra en el ámbito del diseño de moda en Estados Unidos.
Si un Mercedes-Benz G 63 AMG, el verdadero “hierro” de 2,5 toneladas que ha servido como base en este proyecto, tiene un precio en el mercado de 183.150 €, la maqueta escala 1:3 subastada del Mercedes G “Project Geländewagen” ha alcanzado nada menos que los 160.000 dólares (136.600 €) en la puja final de Sotheby’s (Nueva York), elevada cifra pagada por un coleccionista anónimo que ha querido llevarse semejante creación a su casa, una cantidad que a mí me resulta difícil de entender para una simple maqueta, a pesar de ser una pieza única.
Como se dice habitualmente, “juzguen ustedes mismos”. 😉
