Fórmula Uno 2012. ¿Deporte, circo, teatro…?

Estamos al borde del comienzo del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 en Australia y no recuerdo ningún momento comparable al presente. Serán los cambios en los reglamentos o ¿será que la Fórmula 1 ha mutado a teatro después de haber sido deporte y/o circo?

Desde que la reglamentación de esta competición optó por limitar la celebración de ensayos libres con el pretexto o la intención real de reducir costes a las escuderías, lo habitual ha sido concentrar las pruebas de los coches que van a participar en la nueva temporada, haciéndolas coincidir sobre un mismo escenario durante tres o cuatro jornadas.

Programadas para que todas las escuderías tengan la posibilidad de probar sus creaciones en  condiciones de teórica igualdad, viene siendo norma hacerlas coincidir en determinados circuitos con buena climatología invernal y relativa proximidad a sus bases europeas, entre los que se encuentran los españoles de Valencia, Jerez y Cataluña.

Aparte, el interés que sin duda despierta entre la afición, con miles de personas en el graderío, disfrutando por cinco o seis euros de una puesta en escena suficientemente espectacular para acercarse a la idea de lo que es un Gran Premio.

Lo más importante es que, de alguna manera, dada la  infinita variedad de opciones que  prueban y  despliegan sobre la pista las distintas escuderías, según su propia y nunca desvelada forma de organizar su tiempo y su trabajo, tanto la prensa especializada, como los “tifossi” de bocata y nevera “full of beer” pueden especular y apasionarse, incluso, con solventes teorías y disparatadas conclusiones. Y, lo mejor de todo, es que todos pueden acertar en algún vaticinio y todos pueden equivocarse.

Curiosamente , observo una extraña coincidencia: nadie sabe nada de nada. Parece que nada de lo que se ha visto en las tandas de Jerez y Montmeló haya servido para sacar conclusiones válidas que nos permitan predecir con alguna certeza lo que va a empezar a ocurrir ante nuestros desconfiados ojos a partir del próximo 16 de Marzo en Albert Park.

Si pretendemos  sacar alguna conclusión de dominio al final de 12 jornadas de pruebas que comenzaron en Jerez, el día 7 de febrero y terminaron el 4 de Marzo en Montmeló, sería el equipo Lotus-Renault el más destacado, con Raikkonen marcando los mejores tiempos el primer día en Jerez y el 4 de marzo en Montmeló y su compañero Grosjean, encabezando la calificación los días 1 y 2 de marzo también en Barcelona. No está nada mal marcar la pauta cuatro días sobre doce, con pilotos casi “recién llegados” a la Fórmula 1.

Tampoco han ido mal en Jerez los Mercedes, con Schumacher en su labor de afinado y Rosberg confirmando al día siguiente que el equipo teutón empieza a enseñar la patita.

Que Hülkenberg, con Force India, Maldonado y su Williams o Kobayashi y Sergio Pérez con Sauber hayan liderado varios días los tiempos parece denotar que nos encontramos ante una situación de gran igualdad o ante una representación teatral de los “tres grandes”: Red Bull, con Vettel y Webber, en modo “despiste total”, McLaren mostrando su bello “sable de plata” y Hamilton y Button “silbando melodías” y, por fín, Ferrari presentando uno de los coches más feos de su historia y, por lo que cuentan sus pilotos, Alonso y Massa,  “difícil de entender” y auto descartándose para Australia.

Insisto, o nos encontramos ante una representación teatral como un piano, o a los que han construido un engendro que hay que “aprender a llevar” (será que tiene un volante de más como los coches de feria, o pedales de menos), se llamen  Pat Fry o Stéfano Domenicale, habría que señalarles la puerta de salida por bromistas o por inútiles.

Quedan solo unas horas para que se alce el telón (nunca mejor dicho) y quizá nos encontremos con la agradable sorpresa de que, en el teatro, circo, deporte o lo que sea la Fórmula 1 actual, lo que ocurre realmente es que hasta el más torpe hace relojes de madera y funcionan, que las nuevas reglas de la competición han conseguido un efecto nivelador, estrechando las diferencias abismales de las últimas temporadas, que el dominio aplastante de Red Bull es cosa del pasado y que seis campeones del mundo en pista es una ocasión única para devolvernos la fe.

Preparemos nuestros plasmas y con Nira Juanco, Lobato ó Al Jazeera en sintonía, ¡¡¡que comience el espectáculo!!!