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Maldonado juega a ganador en el GP de España

Un relato de El Abuelete del M3 - 14 mayo 2012

Han sido necesarias cinco carreras ganadas por cinco pilotos diferentes, de cinco equipos distintos, para empezar a pensar que Ferrari, el alumno más despistado al comienzo del curso, ha empezado a enterarse de qué va esto de la Fórmula 1 en 2012. Por fin, Ferrari abandona el pelotón de los torpes.

Empecemos por el final y así comprobaremos que un campeonato que ha consumido ya la cuarta parte de su calendario, mantiene una brecha insignificante de 13 puntos entre los dos pilotos que lo encabezan (Vettel y Alonso) y el quinto clasificado (Webber). Resultará cualquier cosa menos aburrido.

Si el año anterior asistimos a un monólogo de Red Bull, este año estamos inmersos en una divertida ceremonia de la confusión en la que puede ocurrir lo menos esperado, como la pole heredada por el Williams de Maldonado después de que Hamilton, que la había ganado en la Q3, fuera desplazado al “cuarto oscuro” del último de la fila por quedarse sin gasolina. Hay ocasiones en que, ahorrar un par de litros de combustible, es un mal negocio.

Ferrari, que anunciaba su propósito de enmienda antes de Barcelona, ha llegado aquí con mejoras que parecen surtir efecto solo en el bólido de Fernando Alonso. Massa sigue sin estar y no creo que en Maranello le renueven su tarjeta de crédito.

Por si faltaba algún elemento para añadir al bendito caos que estamos viviendo, llega Michael Schumacher, siete veces campeón del mundo y afirma muy serio a los chicos de CNN que, pilotar con Pirelli, es como conducir sobre flanes o huevos crudos.

Quiero dejar muy claro que “El Abuelete del M3” ya comparó los Pirelli con la caja de bombones de la madre de Forest Gump. Lenguaje científico y ciencias exactas lo mío y lo de “Schumi”. Y a todo esto, los de Pirelli, encantados de la vida y sin propósito de enmienda. Diversión en la pista y resultados imprevisibles es lo que les pidió el “tío Bernie”.

Todo esto me llevaría a predecir que Jaime Alguersuari, piloto probador de la marca de neumáticos, lo tiene “chupao” para regresar a la Fórmula 1, ¡¡menuda referencia para su currículum entender cómo funcionan los Pirelli!!

Sea como fuere, lo cierto es que, en primera línea de parrilla estaban Pastor Maldonado con su renacido Williams y Fernando Alonso con su Ferrari, celosamente oculto en las tandas libres por sus mecánicos, formando una “rossa” barrera defensiva, más propia de algún equipo que se estuviera jugando el descenso.

Por detrás, Grosjean y Raikkonen (de Lotus) jugando a llevarse bien y, Sergio Pérez, quinto. De ahí hasta el fondo, una parrilla dislocada en la que se alternan los gallos de cresta colorada (Vettel, Schumacher, Button, Webber y Massa) con los polluelos más tiernos. Y, detrás de todos, en el último lugar, el ” lobo feroz” Hamilton. Aquí, el que no corre, vuela…

Eso es lo que hace Alonso nada más ver el semáforo verde. Son más de 700 metros hasta la primera curva y los hace aguantando los arreones de Maldonado. El venezolano no quiere que le roben la cartera en la salida y se defiende duro, pero correcto.

El Ferrari misterioso parece que funciona ¿o es Fernando el que lo hace funcionar? Y cobra una pequeña ventaja que, en algún momento, parece que va a ser suficiente para soñar en repetir la hazaña de Sepang, sin necesidad de ir dando tajos con el kriss malayo. Parece que tiene ritmo, el primer cambio de gomas lo salva sin problemas, pero cuando llega la hora del segundo pit-stop, en la vuelta 25, se encuentra con Maldonado, que se adelanta en la parada y le roba los mejores flanes, bombones y huevos crudos marca Pirelli.

Contrariado porque ahora resulta que la cartera robada es la del asturiano, la bronca en pista se la lleva el doblado Charles Pic, con un Marussia a cámara lenta al que Alonso “saluda muy cortés” cuando puede superarle.

En la vuelta 42, Maldonado vuelve a entrar a por “bombones” o lo que haya y, aunque tardan más de lo normal en despachárselos, se lleva de nuevo los mejores. Cuando en el giro 44 entra de nuevo Alonso a por los suyos, otra vez le dan lo que queda, a ver si tiene suerte.

Durante unas vueltas parece que sí, la distancia entre el venezolano y el español se reduce “casi” a tiro de DRS, pero le falta el “casi”. A todo esto, Kimi Raikkonen está volando bajo y empieza a ser una amenaza real en el retrovisor de Alonso.

Decididamente, el que elige primero lo hace mejor y llega la hora de admitir que Maldonado y su equipo (Williams-Renault) han jugado hoy a ganadores y han ganado. En Venezuela correrá el ron y bailarán bachata.

Frank Williams, esa leyenda viva sobre una silla de ruedas que le impide subir al pódium a recoger el testimonio de su triunfo, puede celebrar con orgullo sus primeros 70 años, ¡¡felicidades Frank!!

  • 2 comentarios

    • CLEOPATRA Y SU BUGA. dijo:

      Oye Abuelete, que entre el Chummy y tú, ya no sabemos si las carreras de formula 1 son carreras de verdad o el anuncio de una pastelería,jajaja. Muy buenas las comparaciones. Estoy nerviosita por saber que bombones le tocarán a nuestro Alonsito en Montecarlo, de momento parece que son de los mas dulces, pero hasta el domingo no lo sabremos, lo mismo le largan un par de juegos rellenos de flan de huevo y ya la hemos liao.Espero que al Maldonado le duela la cabeza de tanto ron y bachata . Me he enterado por tí que eso es un baile, yo creia que era otra bebida valenciana.

    • El Abuelete del M3 dijo:

      Desde luego, Cleo,eres más bruja de lo que pensaba, al Maldonado, como tu le llamas se le atragantó el ron y perdió el compás bailando la bachata, la horchata es otra cosa .En el baile de abueletes al que voy yo cuando no estoy contando batallitas, lo pasamos bomba con la bachata. Hoy me lo he perdido porque me tocaba contar lo de Mónaco, mañana lo podrás leer en http://www.autolimite.com, Tu Alonsito se ha puesto «prímer»…