El Buggy SMG Prototipo se ha convertido en el compañero de aventura de Carlos Sainz en el Rally Dakar 2014, su séptima participación en esta durísima prueba de resistencia “Off Road”.
Según el reglamento técnico, las especificaciones de estos “buggy” de propulsión trasera (4×2) cuentan con ciertas ventajas mecánicas que tratan de equiparar su eficacia con los vehículos 4×4 sobre las deslizantes superficies desérticas (caminos, dunas, terreno pedregoso, etcétera). Así pues, pueden llevar motores de gasolina más potentes, son más ligeros (en torno a 500 kg), les permiten mayor recorrido de suspensiones y pueden contar con un sistema de hinchado/desinflado automático de los neumáticos en marcha, todo ello para contrarrestar su menor capacidad de tracción frente a los vehículos de tracción total.
Carlos Sainz ha participado activamente en la puesta a punto del evolucionado Buggy desarrollado por los especialistas de SMG, un equipo de competición liderado por el también ex piloto y especialista en el Dakar, Philippe Gache. Dicho prototipo tiene un chasis tubular de aluminio y la carrocería está fabricada en fibra de carbono, consiguiendo así un peso final de tan solo 1.400 kilogramos a pesar de sus destacables dimensiones (4,4 metros de longitud y 2,1 metros de anchura) y llevar dos ruedas de repuesto colocadas en la parte trasera.
Su propulsor V8 de gasolina está situado longitudinalmente, centrado entre el habitáculo y el eje trasero para equilibrar el reparto de pesos y obtener así una mayor capacidad de tracción sobre el eje posterior motriz. Desarrolla una potencia de 420 CV y un elevado par máximo de 666 Nm que se transmiten a las ruedas traseras mediante una caja de cambios manual secuencial de dientes rectos (desarrollada por los especialistas de “Sadev”).
Las suspensiones independientes cuentan con doble conjunto de amortiguadores en las cuatro ruedas y ofrecen un recorrido libre de 450 milímetros, permitiendo así que sus enormes neumáticos en medida 37 x 12,50 R17 se mantengan el mayor tiempo posible en contacto con el suelo, además de absorber a la perfección los numerosos saltos a los que se ve sometido el vehículo durante las etapas “dakarianas”.
El chasis se completa con un equipo de frenos que cuenta con cuatro discos flotantes ventilados y ranurados que están mordidos por pinzas fijas de aluminio de seis pistones, desarrolladas por los especialistas de “AP Racing”.
En el habitáculo del Buggy SMG Prototipo se encuentran los mandos imprescindibles para la conducción, los dos asientos bacquet con cinturones de arnés, los botones para activar los dispositivos de seguridad y los distintos instrumentos para controlar el estado de la mecánica a lo largo de las largas etapas del Rally Dakar.
La zona del copiloto cuenta también con el localizador GPS que exige la organización por razones de seguridad (para conocer en todo momento la posición del vehículo en carrera) y un simple equipo de navegación que se activa tan solo a 200 m de distancia de los puntos de control marcados en el libro de ruta que se entrega la noche antes de cada etapa. Además, desde el puesto del copiloto se maneja el sistema automático de inflado y desinflado de los neumáticos sin necesidad de detener el coche. Dicho dispositivo está permitido únicamente en los coches con tracción a un solo eje, contrarrestando así en las zonas de arena blanda la menor capacidad de tracción que tiene respecto a los coches 4×4 (en zonas de arena blanda, los neumáticos con baja presión ofrecen un mayor agarre).
Con todo esto, el Buggy SMG Prototipo del Dakar 2014 permitirá a Carlos Sainz ser especialmente rápido en las etapas que se disputen sobre pistas y terreno muy bacheado, teniendo que luchar con mayor ímpetu en las zonas desérticas de arena suelta frente a los rivales con tracción total.
Hasta el comienzo del Dakar 2014 (5 al 18 de enero), “El Matador” ha sido el vencedor de 25 etapas del rally y el ganador absoluto en la edición del Dakar 2010, a bordo del Volkswagen Race Touareg 2.
